miércoles, 27 de agosto de 2008

Un Lado No Tan Oscuro

Si hay un grupo de los Setenta que trascendió todas las fronteras, ese es Pink Floyd. A pesar de haber nacido en los Sesenta, haber grabado en Abbey Road su primer disco al mismo tiempo que los Beatles registraban "Abbey Road", fue en la década del setenta en la que se hicieron gigantes, eternos e íconos de la música, creando un estilo propio. Es tanto lo que se puede contar de ellos que de todas sus obras, hoy hablaremos del Lado Oscuro de la Luna.



Una vez que se fue Syd Barret, Pink Floyd comenzó a dar cierto giro musical sin cambiar la base de la música conceptual. La voz de David Gilmour y su virtuosismo con las seis cuerdas, permitían probar nuevos sonidos. El disco en sí fue producto de la necesidad. Barret era un autor prolífico y costaba igualarlo. Mientras ensayaban para una gira Europea, compusieron en tan solo 7 semanas la totalidad del álbum. De aquellos tiempo quedó el registro en vivo del recital dado en Pompeya (Italia, no al lado del Riachuelo) en el cual ya se incluye la canción "Eclipse", de cuyas estrofas surgiría el nombre del álbum.



El álbum es meramente conceptual y gira en torno a la locura del hombre en los tiempos que corren, producto de la vertiginosa y materialista vida. El miedo al paso del tiempo (Time, Great Gig in The Sky) la ambición por el dinero (Money) y el temor a la locura (Brain Damage) Curiosamente, Money se transformó en la canción que los hizo millonarios.




Es un disco increíblemente armado de principio a fin. El unico corte que tiene es en las canciones que antiguamente cerraban y abrían el lado A y B del vinilo. Según Roger Waters, los latido al comienzo y al final del disco es por la naturaleza cíclica del universo, la vida. Es una concepción más bien oriental.



El disco fue registrado entre 1972 y 1973, en los estudios Abbey Road con Alan Parsons como ingeniero de sonido. No es un dato menor, ya que muchos de los detalles que en el disco se encuentran, no hubieran podido ser sin Parsons. Cosas que iban desde sincronizar más de 20 relojes de pared para armar la introducción de "Time", hasta poner a correr a un sujeto en el estudio mientras grababan "On The Run".



Salió a la venta el 24 de marzo de 1973 y desde entonces estuvo 591 semanas en la lista de los 200 discos más vendidos (11 años y medio), lista a la que volvió a entrar varias veces, donde luego de 35 años, sigue estando y mejor rankeado que muchas obras nuevas (de hecho, no hace mucho estuvo 21 sobre 200). Para mayor curiosidad, se venden actualmente 5000 discos por semana en el mundo y en Estados Unidos, el 10% de sus habitantes menores de 60 tienen un ejemplar.


Cuentan que un tipo se dio cuenta una vez que si se reproduce el disco de principio a fin, mientras se ve el film "El Mago de Oz" de 1939, es un videoclip de 45 minutos. Yo lo hice. No les pido que hagan lo mismo, pero si buscan por por "The Dark Side of The Rainbow" tendrán la compaginación ya armada.

Para despedirme por hoy, les dejo un video de la reunión de Pink Floyd de julio de 2005, para aquellos que piensan que los músicos de ahora son grosos.



Bruno, para Te cuento los setenta

sábado, 16 de agosto de 2008

Casi humanos...



Perderme un capítulo de estos personajes, ¡¡¡me significaba un pecado capital!!! No me lo podía
permitir. Ellos eran quienes alegraban algunas tardes en mi infancia y lo siguieron haciendo durante la adolescencia y en mi vida adulta. Los Muppets fueron esos muñecos que cobraban vida de manera admirable.
Una rana (
René) era el presentador oficial del programa. Alentaba a todos los artistas que participaban como invitados -que por cierto eran personas reales-.
Cada semana verdaderas estrellas del espectáculo visitaban a estos simpáticos muñecos: concertistas excelsos, cantantes y bandas de rock afamadas, bailarines de diversos estilos, actores, deportistas... multitud de figuras desfilaban por
el show que nació de la mano de Jim Henson.
Este inglés se las ingenió para que sus
"títeres" (o marionetas) ocuparan espacio en la pantalla grande, allá por los años sesenta, sus muñecos flexibles (pues estaban construidos en tela) de características particulares, fueron tomando su lugar en el espectáculo. Y muy pronto fueron aceptados con gusto por la audiencia.

A finales de los sesentas vio la luz:
Plaza Sésamo; un programa en el que se intentaba inculcar valores positivos en los infantes. Actualmente, sigue vigente en varios canales infantiles.


Pero el gran momento de Jim Henson fue la segunda mitad de los años setentas. Para 1976 se iniciaba la transmisión de el
Show de los Muppets, llegando a ser televisado a varios países del mundo.






Debo admitir que este programa sigue arrancándome risas imparables.
Cuando tengo tiempo, me divierte mirar algún capítulo guardado, pues tengo varios videos que conseguí grabar (hace años) y en los cuales cada personaje y cada situación sigue siendo una invitación a la carcajada.

Nunca pensé que alguien fuera capaz de lograr hacer un muñeco con tan diversos formatos.
En este programa vi marionetas de
"Quesos cantantes"; "Pelusas que refunfuñaban", pero no cualquier pelusa ¡¡sino una que había sido vomitada por el gato y dormía bajo un sillón!! ajajaaaaaa

Hoy para mí, un buen rato de humor ingenioso y con gratos recuerdos, en sin vueltas El Show de los Muppets.











De La candorosa, para "Te cuento los setenta"

viernes, 8 de agosto de 2008

Yo quería ser como ella....

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Cuando yo era chica, quería ser como ella!!
La veía en la tele y me quedaba prendada con sus vueltas, sus saltos! Me parecía bellísima y una genia!
Después iba al jardín de mi casa, y sobre el pasto, trataba de imitarla. De mas está decir que lo mio solo servía para una sesión de bloopers! ajajajaa




Ella era Nadia, Nadia Comaneci, la gimnasta rumana, ganadora de 5 medallas olímpicas, la primera en lograr la puntuación perfecta, 10, en una competencia olímpica!!
Nadia nació en 1961 y comenzó a competir a nivel nacional en el 70. A los 13 años ganó tres medallas de oro y una de plata en el Campeonato Europeo de Gimnasia en Skien, Noruega. Un año después, en 1975, la gimnasta superó con cuatro victorias individuales a la rusa Lyudmila Turishcheva, pentacampeona de Europa, y se alzó con la primera posición en la clasificación general individual de las competiciones preolímpicas de Montreal. Ese mismo año, Associated Press la eligió Atleta del Año.



Pero fue en 1976 cuando Nadia cosechó mas triunfos!
Ganó tres medallas de oro: general individual, barra de equilibrio y paralelas asimétricas, una de plata: general por equipos y una de bronce en ejercicios de suelo y siete máximas puntuaciones (10), en los Juegos Olímpicos de Montreal.
El dia que le pusieron el 10, cuando las calificaciones se anunciaron en el tablero eléctrico, apareció un "1.0", ya que el sistema contaba sólo con espacio para un entero y un decimal.

Este fue el primer 10 en la historia de las Olimpíadas!




En 1978, lejos de sus éxitos anteriores, llegaba al Campeonato del Mundo de Gimnasia con peso excesivo y fuera de forma. Una caída en las barras asimétricas la relegó al cuarto puesto de la clasificación final, pero aún tuvo fuerzas para ganar la barra de equilibrio.

De nuevo delgada y en forma, la atleta rumana se convertía en 1979 en el primer gimnasta de todos los tiempos que conquistaba tres títulos europeos consecutivos. Pero durante el campeonato del mundo, en diciembre, cuando Comaneci dominaba las clasificaciones tras el programa obligatorio de la competición, hubo de ser hospitalizada antes de comenzar el programa libre, aquejada de un envenenamiento en la sangre provocado por un corte que se hizo en la muñeca con una hebilla metálica. Contradiciendo las instrucciones de los médicos, abandonó el hospital y compitió en la barra de equilibrio alcanzando la puntuación de 9,95. Gracias a esta actuación, el equipo rumano consiguió su primera medalla de oro por equipos.

Participó de nuevo en los Juegos Olímpicos de Moscú 1980 y se clasificó en el segundo lugar de la general individual tras la rusa Yelena Davidova. En su libro Cartas a una gimnasta joven Nadia Comaneci dice de esta derrota que «[...] aquel día Yelena simplemente lo hizo mejor». Consiguió conservar sin embargo el título olímpico de barra de equilibrio y empató en suelo para la medalla de oro. El equipo de Rumania terminó la competición en segundo lugar.



En 1989 se fugó a Estados Unidos. Allí se comprometió con un gimnasta norteamericano, Bart Conner, y en el 96 se casaron en Rumania.
Nadia y Bart son hoy empresarios exitosos, tienen, entre otras cosas, una línea de ropa deportiva, un gimnasio, realizan obras de beneficencia y promueven las Olimpíadas Especiales.
En el 2003 edita su primer libro, Cartas a un gimnasta joven, y en el 2006 nace su primer hijo.

Nadia se halla, por derecho propio, entre las mejores ginmastas de todos los tiempos!

Al respecto les recomiendo un texto que encontrarán aquí, que completa su vida en un relato muy entretenido.