Cuando la familia Carpenter llegó a Downey, California, a principios de los años ´60, Richard buscaba superar su falta de talento con horas de práctica en el piano, mientras que a Karen, cuatro años menor que él, le importaba poco y nada la música. Sin embargo, la convenció de ser baterista del Richard Carpenter Trío, que duró un suspiro.
Ya siendo dos, pasaron a llamarse Spectrum y, como previendo un futuro provisorio, en 1966 ganaron un concurso colegial y llegaron por primera vez a la televisión. Pero fue recién en 1969 cuando la compañía A&M confió en ellos, rebautizados sencillamente como Carpenters, y firmaron para un primer LP, Offering, que les daría su primer y modesto sencillo en el cover que hicieran del éxito Beatle Ticket to Ride.
En 1970 y con su segundo disco, consiguieron el primer número uno gracias a (The Long to be) Close to You, que se mantuvo en ranking Billboard durante un mes entero. Paralelamente, en el puesto número dos se encontraba el segundo sencillo del álbum, We´ve Only Just Begun. El éxito del disco –Close to You- fue tan rotundo que en una encuesta reciente de la Rolling Stone, figura entre los discos más importantes del siglo XX.
En 1972 el boom Carpenter ya era un hecho y una catarata de sencillos se desprendían de los sucesivos álbumes que el dúo editaba. For All We Know, Rainy Days and Mondays, Top of the World, Jambalaya, Sing y Yesterday Once More, se vendían todas como pan caliente y rápidamente alcanzaban el disco de oro.
Con una reversión del tema Superstar, Carpenters ganó el primer Grammy. Sin embargo, la letra había sido modificada del original por una cuestión de “estilo” del dúo, pero que los más acérrimos críticos calificaron de “oportunismo” por mostrar una imagen para cierto mercado. El verso “no puedo esperar para dormir contigo otra vez” fue reemplazado por el más inocente “no puedo esperar para estar contigo otra vez”.
El perfil familiero del duo era aprovechado por los padres conservadores que veían como una salvación que sus hijos escucharan a jóvenes con valores morales, antes que a los salvajes grupos de Rock. No olvidemos que a principios de los ´70 se editaba Exile on Main Street de los satánicos Rolling, Dark Side of the Moon de Pink Floyd, se encontraban en pleno auge los salvajes The Who y hacía tan solo un par de años que había ocurrido el festival de Woodstock. Por motivos como este, era normal que un single con motivos navideños editado por Carpenters fuera un éxito de ventas.
Entrado 1975, Carpenters edita el trabajo sonoramente más ambicioso de la agrupación. Horizon, que rápidamente fue certificado multiplatino. El cover de Please, Mr Postman fue el corte más vendido como sencillo de aquel álbum y elgrupo esbozó una especie de videoclip del mismo en épocas en que no era habitual hacerlo. Obviamente, y fiel al perfil público de ellos, fue filmado en un lugar que no de miedo a la familia. Disneylandia.
Finalizando los ´70, el éxito de ventas del grupo no se traducía en los rankings. Las tendencias cada vez más hacia el Jazz de Richard Carpenter en medio de la fiebre disco, hacían que no lograran demasiada rotación en las radios. Mientras Karen era prácticamente consumida por la anorexia, Richard debió ser internado en un centro de rehabilitación por su adicción a las pastillas. Al año, Richard estaba recuperado, Karen pesaba lo que debería pesar un ser humano y encima se había casado.
En 1980, realizan un especial para la televisión junto a Ella Fitzgerald y colocan un nuevo éxito en los rankings luego de casi cinco años. Touch me When We´re Dancing. Finalmente el matrimonio de Karen se fue al tacho y su salud también. En su afán por verse más delgada de lo normalmente posible, tomaba 10 veces la dosis necesaria para una persona con problemas de hipotiroidismo. Sólo que ella ni siquiera tenía ese problema. Su corazón le dijo basta en 1983. Karen tenía 32 años.
Si bien fueron para su generación música sólo para adolescentes inocentes, a la luz del paso de los años nadie puede dudar de la voz de Karen, fuerte acaudalada y suave a la vez. Tanto que parece mentira que salía de un cuerpo tan frágil. Carpenters (o Los Carpenters, como nos obstinamos en llamarlos) fueron una parte más que importante en la cultura de los ´70. Y el que diga que no le gusta al menos una canción de su repertorio, miente. Lo sé.
Ok, la próxima la encaro para el Rock, o me enfermo en el camino.
RDP